El genio de la moda Alexander McQueen construyó un universo inimitable: mágico, dramático e irreverente. Sirviéndose de materiales poco convencionales y confecciones artesanales, concebía prendas únicas y complejas como forma de escapismo y liberación.
Sarah Burton fue la compañera de Lee en su búsqueda incansable de la libertad y nadie mejor que ella para tomar las riendas de la firma en 2010 . Fiel a su rico legado, sigue explorando sus sueños y pasiones más profundas infundiéndolas belleza y feminidad, lo que la ha llevado a expandir de forma sorprendente el mundo mágico de McQueen.